Si estás en esta web probablemente quieres quedarte embarazada, lo estás ahora mismo o lo has estado hace relativamente poco.

Sé que no es un camino fácil y por eso estoy aquí, para acompañarte en él y ayudarte a llevar esa mochila que te cuesta tanto cargar.

Buscar el embarazo puede ser muy sencillo, pero en muchas ocasiones es una etapa larga de nuestra vida, llena de luces y de sombras, en las que nos ilusionamos y en las que acabamos derrotadas o en el llanto. Déjame decirte que es normal, pero que puedo ayudarte a que sea un terreno con menos baches.

Y cuando logras quedarte embarazada, podríamos pensar que ya todo terminó y que nos queda pensar en nombres del bebé, ver cómo va creciendo en las ecografías, decidir el color de su habitación e intentar controlarte cada vez que ves ropita en el supermercado. Pero… ¡qué body tan mono! Pero ¿qué nos podemos encontrar? Vómitos, náuseas, dolores en sitios que ni sabías que tenías, miedos por cada ecografía, ansiedad, tristeza…

Nuestro bebé llega a este mundo y ese parto que idealizabas resultó ser doloroso, pasar por complicaciones, acabar en una cesárea de urgencia o fue tremendamente largo…

Está el bebé en casa y te sientes cansada, triste, lloras sin saber por qué e incluso has llegado a pensar que lo quieres más que a nadie, pero que él a ti no, que solo está contento con tu pareja o con los abuelos. Has hecho bien en venir aquí y buscar ayuda, eres muy valiente.

Todo esto sin hablar del personal sanitario que te acompañará durante todo el proceso, los cuales pueden llegar a ser muy desagradables y hacerte daño en cada visita con comentarios o el trato.

Yo también he pasado por todo esto, por eso te ofrezco sostener tu mano en este largo paseo.

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